Año tras año, cada 14 de febrero, millones de personas en todo el mundo, esperan con ansias ese día, haciendo demostraciones de amor a su pareja y amigos; celebrando la festividad de San Valentín, mediante fiestas y regalos.
El día de San Valentín, o día del Amor y de la Amistad, o de los enamorados, cómo muchos le llaman, es realmente una celebración de amor… para muchos es un día comercial, un día en el que personas se desbordan haciendo regalos lujosos y costosos, pero sin ningún valor humano.
Pero ahora bien, estaría correcto: Que los detalles, como flores, globos, chocolates, cenas, osos de peluche, etcétera, ¿solo son presentes que damos en esta fecha? Si es así, ¿ qué pasa con los demás días del año? ¿Será que solo en esta fecha demostramos algo de atención o damos más afecto a nuestros seres queridos?
El amor es un valor dejado por Dios, más que un valor es un mandamiento, por lo que debemos cultivarlo día a día, no verlo como una celebración de un solo día; por lo que es propicia la ocasión para llamar a reflexión sobre la importancia de demostrar el amor a nuestro amados a diario y no sólo en estas fechas.
Al final esos detalles de ese 14 de febrero, o esos regalos y cenas lujosas, solo quedará en ese día, sin embargo lo que realmente importa es ese trato que a diario le das a ese ser querido. Cómo dice Paulo Coelho: “Amor es solo una palabra, hasta que alguien llega para darle sentido” no es que regales todos los días, pero cultiva esos ¡Buenos días mi amor! ¡Buenos días papi y mami! ¡Buenos días amiga querida! ¿Qué tal tu día? ¿Cómo vas de Salud? Qué tal un abrazo o un beso. El amor se cultiva día a día, se demuestra en cada paso que damos, en cada palabra que decimos, no lo compramos en ninguna tienda ni en ningún Restaurant. No trates de entender, solo ama.