Las manifestaciones, que coincidieron con el cumpleaños del expresidente y el 250º aniversario del Ejército de EE.UU., denuncian supuestas tendencias autoritarias en medio de redadas migratorias y tensiones políticas.
Washington D.C. – Decenas de miles de ciudadanos estadounidenses se movilizaron este sábado en más de 2,000 ciudades del país para protestar contra lo que califican como “tendencias autoritarias” del expresidente Donald Trump.
La jornada de manifestaciones, impulsada por la coalición ciudadana ‘No Kings’, coincidió con un desfile militar organizado por Trump en la capital estadounidense para conmemorar los 250 años del Ejército de los Estados Unidos, y también con la celebración de su 79 cumpleaños.
Las protestas, en su mayoría pacíficas, fueron convocadas por organizaciones de derechos civiles, sindicatos y colectivos comunitarios en respuesta a las recientes redadas migratorias ejecutadas en Los Ángeles, donde la presencia militar fue reforzada con el despliegue de Marines.
Líderes locales y estatales han calificado las acciones como un ejercicio desproporcionado de poder que ha encendido la indignación popular.
Movilización en todo el país
Ciudades como Nueva York y Seattle fueron escenario de concentraciones masivas. En esta última, la Policía local estimó una asistencia de más de 70,000 personas, sin que se reportaran incidentes de gravedad.
Las manifestaciones se replicaron en Filadelfia, Kentucky, Texas y varias localidades de California, incluyendo San Francisco, San Diego y Los Ángeles.
La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, participó en la marcha en su ciudad y expresó que estas acciones “reflejan el espíritu democrático y pacífico con el que debemos responder a la provocación, la escalada y la violencia”.
Sin embargo, no todas las manifestaciones estuvieron exentas de tensiones. En el centro de Los Ángeles, unidades policiales utilizaron balas de pimienta y artefactos aturdidores para dispersar a grupos que, según informes, lanzaban objetos y fuegos artificiales.
También se reportaron disturbios aislados en Minnesota, donde un tiroteo dejó a dos legisladores estatales demócratas como víctimas, uno de ellos fallecido. Las actividades programadas en ese estado fueron canceladas tras el ataque.
Demostración de fuerza en la capital
Mientras se desarrollaban las protestas, Donald Trump encabezaba un desfile militar en Washington D.C., acompañado por cerca de 7,000 soldados uniformados y más de un centenar de vehículos militares.
En su discurso, el expresidente aseguró: “América se mantiene fuerte, orgullosa y libre. Somos el país más dinámico del mundo y pronto seremos más grandes que nunca”.
La ceremonia ha sido interpretada como un acto simbólico de fuerza política y patriotismo, al estilo de los desfiles militares europeos, particularmente el celebrado cada año en Francia. Trump recordó que durante su primer mandato intentó llevar a cabo una actividad similar, aunque fue cancelada por motivos presupuestarios.
Tensiones en aumento
Las acciones del exmandatario han generado intensas reacciones en distintos sectores del país, especialmente tras el endurecimiento de medidas migratorias y su retórica confrontativa con líderes demócratas.
El movimiento ‘No Kings’ ha tomado fuerza como respuesta a lo que considera una amenaza a los principios republicanos y democráticos que rigen la nación.
A medida que se acercan nuevos procesos electorales, el país parece enfrentarse a una creciente polarización entre quienes respaldan el retorno de Trump y aquellos que ven en sus iniciativas un peligro para el sistema institucional estadounidense.