“Gastaría hasta 60 millones si fuera necesario… para que los envidiosos se exploten”, expresó el merenguero dominicano tras los señalamientos.
Santo Domingo, República Dominicana.– El cantante Rubby Pérez reaccionó molesto ante las críticas surgidas tras la celebración de los quince años de su hija, en la que destacó un pastel valorado en 600 mil pesos. El merenguero defendió su decisión, calificando de “envidiosos” a quienes cuestionaron el gasto en redes sociales y medios.
“¿Por qué la gente es tan envidiosa? Todo el que no puede hacer algo, por ejemplo, el que no se puede comer un locrio de salami y te ve comiendo locrio de salami y dice: ‘Mira, ese desgraciado comiéndose ese locrio de salami’”, expresó Pérez, visiblemente indignado.
El intérprete, conocido como “La voz más alta del merengue”, explicó que la celebración fue realizada con amor para su hija, fruto de su relación con la diseñadora de moda dominicana Michelle Reynoso, y que no escatimó en gastos porque considera que su hija lo merece todo.
“Gastaría cualquier cantidad de dinero por mi hija. En este caso ni siquiera pensé en cuánto fue, y si tengo que gastar hasta 60 millones, lo hago… para que los envidiosos se exploten”, reiteró el artista.
Sobre quejas de empresarios en EE. UU.
En otro orden, Rubby también abordó el tema de las quejas de empresarios de discotecas en Estados Unidos, quienes han manifestado inconformidad con los supuestos altos costos que cobran algunos artistas dominicanos.
El merenguero fue tajante al afirmar que los empresarios deben revisar su modelo de negocio.
“Las discotecas no son lugares de beneficencia. Si hay un negocio que no te conviene, no lo hagas. Si tú entiendes que yo te estoy cobrando demasiado, no me lleves; invita a uno que te esté cobrando dos cheles”, expresó, dejando claro que no bajará sus tarifas por presión del mercado.