Si algo pudiéramos asegurar en este momento, es que, en noche buena, en cada hogar del país hubo de todo y para todos.
Desde la avenida Núñez de Cáceres, hasta la Cayetano Germosén en la ciudad capital, así como en las autopistas San Isidro, Duarte y la Carretera Sánchez, se pudo apreciar que se vendía la tan demandada carne de cerdo y otros productos que nunca faltan en la cena de noche buena.
Al gobierno, sin importar su color o quien ejerza el poder, hay que reconocerle los esfuerzos realizados para lograr atender las necesidades de los productores de cerdos y así enfrentar la crisis desatada en ese sector producto de la fiebre porcina, hecho que permitió que hubiera abundancia para estos tiempos de dicho producto.
Y es que, lo que hasta ahora se ha hecho, sumado a las políticas implementadas desde el Ministerio de Agricultura, es precisamente lo que ha permitido que cada dominicano haya podido encontrar cerdo que comprar, para comer en noche buena y guardar para Navidad.
Lo hecho hasta ahora representa un nuevo reto para el gobierno y el sector, que, en lo adelante, se debe preparar para que, la abundancia de productos continúe y que la gente pueda encontrar lo que busca para que, en la cena de año nuevo, así como en noche buena, en la mesa de cada hogar del país haya de todo para comer y hasta guardar.
Por: Yiraldy Hernández
Residente en El Factor, María Trinidad Sánchez.