Desde tempranas horas del día lunes, corría como pólvora en redes sociales un video en el que se veía cómo un agente de la Policía Nacional era agredido por un ciudadano en un confuso incidente ocurrido en la provincia de San Francisco de Macorís.
Escolástico, como popularmente se le conoce, es Coronel de la Policía Nacional y quien cumple sus funciones asignado a la dotación policial de la provincia Duarte; es el agente que habría sido víctima de agresión por parte de un ciudadano en cumplimiento de sus funciones.
El video, que en pocas horas se hizo viral en nuestro país y que era replicado con rapidez en perfiles de Facebook, debe llamar mucho la atención de la población dominicana, puesto que, si bien es cierto que nuestra agencia de protección al ciudadano requiere ser humanizada, educada y reenfocado su accionar, no menos cierto es que, el penoso hecho lo que evidencia es una clara carencia de respeto por la autoridad por parte de la ciudadanía.
No siempre resulta fácil respetar a quienes tienen cierto grado de autoridad, pero hay que hacerlo, sobre todo cuando el irrespeto a ella, debilita las instituciones que están llamadas a cuidar de cada uno de nosotros y promueven la violencia y el salvajismo de una sociedad como la nuestra, que hoy más que nunca requiere de respeto, amor por el prójimo y mejores ejemplos.
Desde este diario condenamos el penoso hecho en el que agentes policiales y civiles se faltaron el respeto, pero sobre todo, la agresión de la que ha sido víctima el coronel de la Policía en momentos en que cumplía con su deber.
Acatar y respetar la autoridad, independientemente de que el mundo sea cada día más rebelde, como bien reza La Palabra en Proverbios 24:21, es más que una necesidad.
Reflexionemos no sólo sobre estos hechos, sino también de lo que provocamos cuando promovemos en nuestras redes hechos penosos y condenables como los citados anteriormente.