El nuevo papa recibió el palio y el anillo del pescador en un acto solemne que marca el comienzo de una nueva etapa para la Iglesia Católica.
Ciudad del Vaticano.- Miles de fieles se congregaron este domingo en la Plaza de San Pedro para presenciar la ceremonia de inicio del pontificado de León XIV, quien fue oficialmente investido como nuevo papa de la Iglesia Católica durante un acto solemne cargado de simbolismo y presencia internacional.
El evento comenzó con el tradicional recorrido del pontífice por la explanada en el papamóvil, saludando a la multitud que ondeaba banderas de diversos países y vitoreaba con entusiasmo.
Tras el paseo, León XIV ingresó a la Basílica de San Pedro, donde dio inicio a los ritos litúrgicos que formalizan su ascenso al trono de San Pedro.
Durante la liturgia, el nuevo papa recibió los dos principales símbolos del papado: el palio, una estola confeccionada con lana de cordero que simboliza el cuidado pastoral del obispo de Roma, y el anillo del pescador, pieza emblemática que representa la autoridad espiritual del sucesor de San Pedro.
Presencia internacional en primera fila
La ceremonia contó con la asistencia de múltiples líderes y delegaciones diplomáticas de todo el mundo. Estados Unidos estuvo representado por el vicepresidente James David Vance y el secretario de Estado, Marco Rubio. La presidenta de Perú, Dina Boluarte, también figuró entre los invitados de honor, dada la doble nacionalidad del nuevo pontífice, lo que refuerza la conexión de su figura con América Latina.
Entre otros dignatarios presentes se encontraban la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni; y el presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, quien fue identificado por el protocolo del Vaticano como líder del “régimen de Kiev”, en una expresión que ha generado diversas reacciones en medios internacionales.
Una nueva etapa en la Iglesia
Con esta ceremonia, León XIV inicia un pontificado que se proyecta como una nueva etapa en la historia reciente del catolicismo, marcada por desafíos globales como el conflicto armado, el cambio climático, la crisis migratoria y el distanciamiento de algunos sectores con la institución eclesiástica.
El nuevo papa ha sido recibido con altas expectativas, tanto dentro del Vaticano como entre los fieles de distintas partes del mundo, y se espera que en los próximos días emita su primer mensaje apostólico al pueblo cristiano y a la comunidad internacional.