Al parecer, tenían que supuestamente, intentar secuestrar a importantes figuras dominicanas, para que la autoridades comprendieran la importancia de establecer mayor y mejores controles en las zonas fronterizas del país.
Desde el reforzamiento de la vigilancia en la frontera con Haití tras el supuesto secuestro, hasta la designación de una comisión especial para investigar los hechos, son de las medidas tomadas como resultado de lo acaecido en Restauración hace unos días.
Una vez más, en asuntos de migración y frontera, las autoridades demuestras que tal parece que será necesario que la sangre al masacre llegue, para luego entonces poner en marcha las acciones concretas y necesarias para no solo regular lo que en nuestros espacios fronterizos se da, sino también aplicar controles.
¿Cuántos hechos de este tipo se habrán registrado antes y no habrían tenido la repercusión de este? ¿Será que «la frontera» y sus dolores, sólo serán importantes cuando afecte a los ricos?
Veremos pues… Esperamos no solo los resultados de la investigación, sino también que los controles que ante estos hechos recientes se han aplicado, sean permanentes y que de una vez y por todas, la llamada «tierra de nadie», no encuentre dueño, porque lo tiene, sino dolientes.