Santo Domingo.- Economistas consideran preocupante el panorama que se ha estado viviendo en la República Dominicana con el tema de los precios de los productos de la canasta básica y de los insumos a nivel internacional. También, los precios de los combustibles tienen una tendencia alcista.
Tanto Henri Hebrard como Antonio Ciriaco entienden que el Gobierno tiene que hacer inversiones importantes en el sector agropecuario dominicano, con el objetivo de que los alimentos se acerquen más a los consumidores.
“Esto está confirmando una tendencia muy preocupante para República Dominicana, parece una muy mala noticia para el primer semestre este tema de la inflación. De acuerdo con los datos que acaba de publicar el Banco Central tú ves que la tasa de inflación acumulada de los últimos 12 meses está en su mayor nivel desde enero de 2012, o sea, que estamos llegando al nivel de inflación más alto de los últimos nueve años”, expresó el economista Henri Hebrard.
En su último informe el Banco Central de la República Dominicana (BCRD) explica que el índice de precios al consumidor (IPC) en enero de 2021 registró una variación de 0.97 % con respecto al mes de diciembre de 2020, mientras la inflación interanual de la serie analítica o referencial asociada a la nueva canasta del IPC (base octubre 2019-septiembre 2020) fue de 5.35 % al cierre del mes de enero.
De su lado, Antonio Ciriaco, vicedecano de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), dijo que no cree que el actual escenario sea transitorio como lo expresara el Gobernador del Banco Central, advirtiendo que hay que tener mucho cuidado con el tema de la inflación importada porque entiende que lo que está viviendo la República Dominicana es una inflación importada producto de un incremento en los últimos meses en los precios del petróleo que ha acumulado un incremento de un 34 %.
Además, indica que, igualmente, el precio de la soya ha acumulado un aumento de un 39 %, el maíz de un 25 %, el trigo un 21 % y las grasas comestibles, es decir, los aceites, de alrededor de un 34 %.
“Todo eso evidentemente que ha tenido incidencia en los costos de producción de muchos bienes y servicios básicos que conforman la canasta básica nueva de 364 bienes y servicios a partir de la nueva metodología que utiliza el Banco Central para medir la inflación”, argumenta.
Ambos economistas entienden que las alzas de los precios de productos sensibles ponen presión a la economía, agregando que este año se suma un nuevo elemento que es el debate sobre el aumento al salario mínimo, que, tomando los nuevos niveles de los quintiles, hay una diferencia de más de un 20 % entre el salario mínimo y el quintil uno.
“Estos temas son muy sensibles y van a poner mucha presión a la economía, a las relaciones sociales, ya que en el mes de mayo toca la discusión del aumento del salario mínimo. Y eso, obviamente, va a poner mayor presión sobre la necesidad de incrementar los salarios, más cuando tú ves que las nuevas canastas que ha publicado el Banco Central muestran que el valor del quintil uno supera los RD$$21,000”, señala el economista Henri Hebrard.
Precisa que todos los alimentos están subiendo a nivel internacional y por encima de eso está la escasez de contenedores y la fuerte subida del petróleo, que recientemente rebasó la barrera de los US$60 por barril.
Hebrard entiende que para paliar la situación se debe asegurar en un mediano plazo que haya producción de alimentos en el país y entiende importante revisar todos los rubros de producción e inclusive ver si se puede lanzar una producción de ciclo más cortos.
Sugiere recortar las cadenas de distribución, considerándolas que todavía son relativamente largas y provocan que los alimentos lleguen más caros a los consumidores.
El BCRD en su informe explica que la variación de 1.06 % del índice del grupo Alimentos y Bebidas No Alcohólicas obedece principalmente a los aumentos de precios de la clase carnes con el 5.27 %, dentro de las cuales se encuentran el pollo fresco 6.74 %, carne de cerdo 6.93 %, de res 5.04 %, molida de res 6.50 % y chuleta ahumada 1.35 %, así como a los incrementos en los huevos de 2.50 %), aceite de soya 2.61 %, arroz 0.76 %, aguacate 9.34 %, caldo de pollo 2.15 %, limones agrios 15.25 %, refrescos 1.05 % y azúcar morena 1.59 %.
En tanto, otros bienes alimenticios reflejaron rebajas de precios, tales como cebollas -18.11 %, ajo -15.40 %, plátanos verdes -3.64 %, papas -3.22 %, batatas -8.62 % y habichuelas pintas -1.52 %, las cuales repercutieron en que la inflación del grupo Alimentos y Bebidas No Alcohólicas en el mes de enero de 2021 no fuese más pronunciada. Con respecto al índice de precios correspondiente al grupo vivienda, este varió 1.11 % en enero de 2021, debido principalmente por el incremento de precio del gas licuado de petróleo de uso doméstico (GLP) en 5.83 %.
El BCRD informó que los resultados del IPC por estratos socioeconómicos en el primer mes del año arrojan que los índices de precios en los quintiles de menores ingresos variaron 1.05 % el quintil 1, 1.04 % el quintil 2 y 1.07 % el quintil 3, debido a que el IPC del grupo Alimentos y Bebidas No Alcohólicas, tiene mayor importancia relativa en sus canastas.
En tanto, que el IPC de los quintiles de mayores ingresos (4 y 5) registraron tasas de inflación de 1.01 % y 0.81 % respectivamente, debido principalmente al comportamiento del índice de precios del grupo Transporte.