El número de muertos por COVID-19 en el mundo ascendió hoy a 238.000, mientras que las infecciones se situaron en 3,34 millones (aunque más de un millón se han recuperado ya), de acuerdo con las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La gráfica de casos diarios se mantiene desde hace un mes entre los 70.000 y los 90.000 nuevos casos por jornada, mientras que la de mortalidad está también estabilizada, en su caso desde hace dos semanas, en 5.000-6.000 fallecimientos cada 24 horas, de acuerdo con las estadísticas de la organización.
Europa sobrepasó hoy el millón y medio de casos, mientras que América se sitúa en 1,35 millones y ambas regiones concentran más del 80 por ciento de los casos de COVID-19 confirmados globalmente.
Sin embargo, ambos territorios muestran en sus gráficos cierta tendencia a la baja en el número de nuevos casos diarios (más marcada en el caso europeo que en el americano), mientras que la curva sigue siendo ascendente en otras zonas por ahora menos afectadas como África, Oriente Medio o el sureste asiático.
Según las estadísticas de las autoridades sanitarias nacionales, un 2 por ciento de los pacientes actualmente en tratamiento en todo el planeta (unos 50.000, cifra que ha descendido desde casi 60.000 a mediados de esta semana) se encuentran en estado grave o crítico.