En los últimos años en la República Dominicana han aumentado las enfermedades, algunas de las cuales antes ni se mencionaban en el país. Hoy día la salud se ha convertido en un bien de lujo.
En virtud de que constituye una decisión sumamente importante cuidar a las personas jóvenes, pues ellas serán el relevo de los mayores y el futuro de la nación, se hace pertinente que se imparta una educación de calidad, pero también que se cuide la salud de dicho segmento de la población.
A raíz de la implementación del modelo de jornada de tanda extendida en el sistema educativo dominicano, la mayoría de las escuelas y liceos del país en los actuales momentos se encuentran bajo esa modalidad.
Al tener los estudiantes y docentes que permanecer en el recinto escolar 8 horas, esto es desde la 8am hasta la 4pm, tienen que consumir alimentos y se pueden ver expuestos a cualquier situación que amerite una atención médica.
Una de las múltiples funciones de la escuela es garantizar la protección de los alumnos y dicha protección no solo conlleva evitar que los mismos puedan sufrir cualquier tipo de accidente sino también que se le garantice el cuidado de su salud mientras dure la labor docente.
Los estudiantes están expuestos en los centros educativos a enfrentar una serie de riesgos y se debe disponer de una serie de medidas para mitigarlo. Pueden ellos presentar diferentes tipos de dolencias o enfermedades que requieren de un experto en salud para que pueda brindarle la primera asistencia. Pues no debemos olvidar que los padres se encuentran en sus trabajos el día completo y no disponen del tiempo necesario para ante cualquier eventualidad de un hijo salir de los mismos.
La salud no es solo la ausencia de enfermedades, sino es también el Estado de bienestar físico, emocional, intelectual, vocacional y espiritual, que le permite a una persona poder realizar sus diversas actividades, según lo ha referido la organización mundial de la salud. Sin salud no podemos realizar ninguna actividad.
Por todo lo antes dicho, en estos tiempos se hace necesario que en los centros educativos exista un medico escolar que sería aquel profesional de las ciencias médicas preparado para afrontar las enfermedades que se producen dentro del ámbito educativo y que afectan a los estudiantes.
Hay muchos alumnos que presentan diversidad de enfermedades: desnutrición, hipertensión, diabetes, mareos, dolor de cabeza, agotamiento físico, entre otras dolencias más y cuando estas se hacen presente las escuelas no cuentan con un personal preparado para hacerle frente a las mismas.
Para poder darle frente a esas enfermedades que se pueden presentar a los estudiantes en los centros educativos se hace urgente un medico escolar, en caso de que sea imposible un medico por lo menos una enfermera.
En los centros educativos con medico escolar se pueden detectar enfermedades que afecten a los estudiantes a tiempo y tratarla temprano, pero también se pueden impartir charlas y talleres sobre cómo cuidar la salud en los adolescentes.
Entendemos que el ministerio de salud pública sabe que hay una gran cantidad de médicos graduados que no están trabajando para el Estado y que ejercen sus funciones en clínicas, muy a pesar de que muchos de ellos estudiaron en la UASD, que es la universidad del Estado. Ahí tienen una buena oportunidad de que dichos profesionales puedan trabajar y devolver de esta manera parte de lo que el Estado ha invertido en su preparación.
Finalmente en las universidades dominicanas ante la realidad de la jornada de tanda extendida se hace más que necesario que cree la especialidad de medico escolar para capacitar profesionales en esa área.
Hediberto Pichardo. MA